Para poder lograrlo es necesario un análisis minucioso e intensivo del terreno, mucha creatividad e ingenio y, obviamente, contar con conocimientos especializados sin olvidar lo importante que es el cariño por cada detalle, ya que con muchas piedras pequeñas se pueden construir grandes montañas.
Es así cómo se debe entender la sostenibilidad. Hay que estar dispuesto a enfrentarse a nuevos y desconocidos caminos, para aprender cada día, para cometer errores, para tener dudas, para intentarlo y mejorar.
Para nosotros querer significa poder.
Pero todo esto es posible solo si se tienen los socios idóneos. Nos sentimos muy afortunados de poder contar con el estudio de arquitectura OHLAB, con sede en Palma, para nuestro primer proyecto Son Vida en Mallorca. Paloma Hernaiz y Jaime Oliver, ambos fundadores, no solo conocen la isla como la palma de su mano, sino que, además, destacan por su arquitectura única combinada con una gran sostenibilidad.
Tan solo con el primer proyecto nos dejaron sin palabras, tanto por su arquitectura poco común como por su rigurosa y meditada sostenibilidad.
Junto con OHLAB y otros expertos en energía hemos podido desarrollar el concepto de sostenibilidad para este proyecto, que no solo tiene en cuenta la protección de los recursos, sino que también intenta minimizar al máximo la intervención en la naturaleza que se nos presenta. Y en esto vamos incluso más allá, al integrar la naturaleza presente en el diseño arquitectónico.
Nuestro primer proyecto en Son Vida en Mallorca muestra cómo hacer que la naturaleza circundante sea una parte fundamental de nuestro concepto de sostenibilidad.
Comienza con las propias condiciones que el terreno nos presenta. Como aislante natural utilizamos la ladera rocosa, junto con la relativamente alta predominante temperatura del suelo de Mallorca. A lo que hay que añadir que la construcción se emplaza en el interior de la roca.
Para lograr un ahorro óptimo de energía, tanto en la utilización del aire acondicionado como en la calefacción, se han dispuesto las aperturas de las ventanas y los tragaluz de tal manera que en verano se proyecte el menor sol posible en la construcción y en invierno, por el contrario, el mayor posible.
Un ingenioso sistema de ventanas tragaluz asegura la luminosidad interna de la casa.
Otro elemento de la naturaleza mallorquina que también aprovechamos es el prevaleciente viento. Contamos con una ventilación natural gracias a la disposición de las ventanas y las escaleras, lo cual reduce también el consumo de energía para la climatización.
Para lograr un mayor ahorro de energía, instalamos un sistema de aireación con recuperación térmica y una bomba de aire caliente para conseguir el calor. Nos aseguramos de que el sol de Mallorca ayuda a la vivienda a ser autosuficiente gracias a una instalación fotovoltaica que incluye una batería de almacenamiento intermedio. Además, utilizamos módulos de energía solar para generar agua caliente.
El consumo de agua es uno de los temas de actualidad en Mallorca.
La sequía en verano hace que los pozos se sequen y se tenga que transportar agua de la península para que las desalinizadoras la conviertan en agua potable y así poder suministrarla a los habitantes de la isla.
Las piscinas son las principales causantes de la sequía en Mallorca, ya que la mayoría se llenan de agua dulce.
Y es aquí donde queremos contribuir reuniendo cada gota de lluvia que cae sobre el terreno o la casa en tanques y depurarla correctamente para intentar no utilizar más agua dulce de la cuenta. De este modo, por ejemplo, se llenará la piscina con dicha agua depurada.
Uno de los objetivos de nuestros proyectos es intervenir lo mínimo posible en la naturaleza. Por consiguiente, los proyectos inmobiliarios de OHLAB en Son Vida están tan insertados en la naturaleza que casi no se pueden ver a simple vista. Están fusionados con la naturaleza. Solo algunas partes de la construcción sobresalen de la roca.
Para la concepción de la parte externa no colocamos rollos de césped ni tampoco el típico jardín, sino que algo mucho mejor: dejamos que la naturaleza recupere por sí misma la mayor parte del terreno.
Además, la flora y fauna del terreno podrán volver a tener libertad cuando terminen las labores de construcción. Siempre tenemos en cuenta que el terreno se encuentra directamente al borde de la reserva natura de la Sierra de Tramontana.
Nuestro concepto de sostenibilidad se amplía. Así que planeamos, por ejemplo, diferentes medidas técnicas para la automatización de inmuebles. Además, ofreceremos a los futuros habitantes un concepto de servicio para una vida sostenible a conciencia.
Como homenaje a la naturaleza y a las posibilidades que nos brinda, hemos otorgado a nuestro primer proyecto el nombre de Casa Xaloc, el así denominado viento de Mallorca.
Urbanización privada 24 horas en el mejor ambiente, servicio de seguridad localizado, 3 pistas de golf, a 10 minutos en coche del casco antiguo, a 15 minutos del aeropuerto de Palma, colegios internacionales.
Uno de los últimos terrenos sin construir en el encantador casco antiguo de Sóller, a tres minutos a pie de la idílica plaza del mercado, con sus restaurantes y cafeterías, llena de vida y a la vez un lugar para relajarse.
